miércoles, 20 de enero de 2016

LA UNIDAD DE LOS REVOLUCIONARIOS. Y LA CONCEPCION DE PODER

  • La historia nos ha colocado en un desafío por lo demás crucial y determinante, lo que hagamos o dejemos de hacer en la construcción del estado comunal, en los próximos días, será decisorio en los acontecimientos futuros del proceso revolucionario bolivariano. no referimos a todo ese proceso de debate y construcción que los colectivos o individuos están desarrollando como iniciativa por la construcción del poder popular. La manera como nos planteemos ese debate, los temas que coloquemos en la mesa y sobre todo la práctica que desarrollemos a propósito de esa iniciativa nos colocaran al frente de ese proceso o la cola de los acontecimientos.
  • No se trata solo de consigna como por ejemplo “comuna o nada”, ello lleva inmerso todo un andamiaje de propuestas, de acciones, que deben tener como características y metodología una concepción revolucionaria de hacer y decir las cosas, no debiéramos atrevernos a edificar ese hermoso estado comunal, si antes no tenemos, construimos una concepción de poder que lo guie y materialice. Claro construida en colectivo y asumiendo el debate como practica de esa construcción
  • Las amenazas del imperialismo norteamericano y las practicas de sus títeres ya sean guarimberos o saboteadores de la economía no hacen más que mostrar las intenciones próximas, de golpe de estado contra nuestro gobierno bolivariano y replantean la urgencia para que el potencial ofensivo de la Revolución se despliegue con rapidez para realizar las transformaciones sociales profundas que las expectativas populares esperan.
  • Ya no se trata de limitarse únicamente a defender el gobierno y el terreno conquistado de la amenaza imperialista y la contrarrevolución interna. Es necesario impulsar aceleradamente la destrucción de aquellas viejas relaciones económicas, sociales y culturales que, aunque están en retroceso, siguen siendo apoyos firmes para esa amenaza reaccionaria. Gran parte de las mismas perduran intactas y son el mayor obstáculo para construir – sobre la base material de esa herencia recibida – las nuevas relaciones sociales, que genérica y abstractamente se las resumen bajo el nombre del Socialismo del siglo XXI.” N. bacher. Unificar ideas para unificar la lucha
  • Para que las nuevas formas de organización social, logren materializarse, con la conciencia del pueblo en su más alta expresión (sin las cuales es imposible construir socialismo) , necesario es que coloquemos en el debate algunos temas cruciales en el campo revolucionario y cuya postergación indefinida entraña un riesgo para el proceso y que además tienen un carácter esencialmente estratégico que obliga a colocar el debate en la esencia que necesitamos y abstraernos de debates subalternos que rallan en el inmediatismo. No estamos diciendo que no discutamos el momento político, la coyuntura. Sin ese debate podemos perder el rumbo de la lucha que salta frente a nosotros, lo que decimos es que eso debe hacerse en comunión con los temas cruciales de la revolución, mecanismo y métodos para desarrollarla y la consabida práctica que logre orientar al pueblo sobre los caminos que debe seguir.
  • Debemos debatir como tema central, sobre el socialismo, contenido, programa y su diferenciación con otras experiencias triunfantes o derrotadas, debe ser un debate teórico que nos logre apartar y diferenciar de los sectores reformistas, porque a menudo, solo hablamos de socialismo del siglo XXI, creyendo que con esto es suficiente para dejar sentado que se trata de un socialismo diferente, algunos hasta han llegado a afirmar que se trata de un socialismo nuevecito, a la venezolana en donde el igualitarismo es la máxima Lo que decimos es que ese debate es necesario para delimitar ideológicamente el campo revolucionario.
  • Después se necesita un debate sobre la estrategia de poder que atienda las condiciones necesarias y la fuerzas para avanzar desde donde estamos hasta el cumplimiento de los objetivos estratégicos ¿Cuáles son? Destrucción del viejo estado y construcción del nuevo bajo dirección del pueblo. Sin esa definición de la estrategia de poder es imposible consolidar la unidad del pueblo que se resume en la unidad de sus organizaciones y para que el rumbo hacia el socialismo que está planteado en el horizonte cercano de nuestra Revolución no quede en una simple retórica, transformándose en factor de confusión, desmovilización y en última instancia de división, para las grandes masas
  • Como siempre, en la lucha política las respuestas necesarias no surgirán sólo desde el plano del análisis teórico sino también desde las enseñanzas que deja la tarea práctica, central y cotidiana, de organizar políticamente a las clases revolucionarias interesadas en el socialismo, de allí que en nuestra práctica diaria, nos hemos topado con estos grandes temas del debate necesario, que queremos compartir con todas y todos.


LA ORGANIZACIÓN Y LA CONCIENCIA
  • La tareas que desarrollemos debe guardar relación con hacer crecer los niveles de organización y de conciencia de la gente, se trata de encauzar la lucha del pueblo como protagonista de su propia historia, la movilización constante, los escenarios para la discusión, las decisiones colectivas son la clave para esa construcción de la patria, y además son un atentado contra las prácticas oportunistas y politiqueras que aprovechan de tener información para ofrecer al pueblo dadivas a cambio de protagonismo y contra aquellas practicas ciegas carentes de contenido sin rumbo o estrategia, cada vez que estemos desarrollando una actividad detengamos un momento y reflexionemos: esto que estoy haciendo contribuye a desarrollar la conciencia y organización del pueblo si la respuesta es sí. sigamos avanzando, pero si la respuesta es no, detengamos porque no estaremos contribuyendo a desarrollar el estado comunal. Recordemos que en última instancia lo que se construye no son los espacios de poder, lo se construye es la conciencia y organización.
DARLE CALOR DE PUEBLO A LAS POLITICAS REVOLUCIONARIAS
  • Nuestra revolución ha producido una serie de iniciativas, de políticas que de alguna manera pretende, construir un estado de felicidad distinto al capitalismo, la mayoría de las veces esas políticas justas, solo son desarrolladas desde el estado en una relación paternalista.
Es deber de la comuna, y los revolucionarios, encauzar esas políticas y llenarlas de pueblo y contenido
  • Es indudable que la movilización del pueblo ha bajado, ello tiene su origen en que las perspectivas para el desarrollo de sus luchas también se ha visto disminuidas en lo político. Es decir al pueblo dejo de presentársele la alternativa de movilización y menos de organización por las conquistas de sus derechos, tal cual lo planteaba el comandante. A cambio, grupos, grupúsculos, personeros del partido o de cualquier ministerio, ha venido actuando como intermediarios y por tanto castradores de la acción y por ende de la conciencia. En la comuna hemos llegado a la conclusión más por nuestra propia experiencia que por el estudio de otras que la movilización del pueblo tras sus reivindicaciones, por la vivienda, por la salud, la alimentación al final de la lucha se transforma en lucha política por el poder, porque el resultado exitoso o no del proceso movilizador le explota en el cerebro y le plantea alternativas superiores, por lo demás que las constantes movilizaciones actúan frente al estado como una demostración de fuerza (es una demostración de fuerza)a la cual casi siempre actúan dándole la reivindicación exigida, de tal manera que el pueblo movilizado entiende que allí radica su fuerza. es cierto que el saldo obtenido se reduce a unos cuantos decenas de hombres y mujeres de miles que se movilizan pero ellos y ellas, se convierten en líderes y lideresas de luchas mas allá de la mera reivindicación. Así quedo demostrado en el pasado proceso electoral. No fueron la UBCH por lo menos por estos lares quienes se organizaron y movilizaron por la victoria de la revolución, fueron las innumerables organizaciones comunitarias productos de la movilización que hicieron posible la victoria.
  • A esta forma de lucha le denominamos, darle calor de pueblo a las políticas revolucionarias del gobierno. Sin las cuales estas políticas se convertirían en políticas asistencialistas, es con la movilización del pueblo que esas políticas justas se convierten en elementos para la organización y la lucha.
NECESIDAD DE ESTABLECER UNA CONCEPCION DE PODER PARA SEGUIR AVANZANDO
  • Uno de las conclusiones políticas de nuestra revolución bolivariana ha sido el establecer que nos encontramos en un proceso de transición camino hacia el socialismo y que es necesario resolver en esa transición los elementos necesarios políticos e ideológicos que nos permitan seguir avanzando.
  • Una de esas necesidades es tener un estado de la transición (necesario indudablemente mientras el pueblo no se convierta en tal) que además de ser eficiente en el logro de las reivindicaciones de todos los días o menudas, pueda ser expresión de las decisiones del pueblo (mandar obedeciendo) en luchas de mas envergaduras contra la burguesía en el terreno del control de la producción y de la economía en general. Algo de eso está sucediendo pero en muy pequeño, con algunas empresas en manos de los trabajadores y de las comunas productivas, pero es indudable que la burguesía aun sustenta mucho poder sobre todo económico que resulta muy superior a las acciones a veces aisladas de elementos revolucionarios dentro de ese mismo estado .
  • El resultado de las mediadas económicas que afectan las producción, el control obrero de la misma al lado de la comunidad organizada, la nacionalización de la importación de bienes que permita importar en base a la necesidad y no para la demanda, parecieran medidas a tomar que permitirían como dijimos anteriormente colocar la lucha de clases en su términos exactos y que además aceleraría la destrucción de ese viejo estado porque es indudable que la burguesía se le agotarían las maniobras que le permite el gobierno transitorio.
  • Así como el capitalismo necesita del poder político de la burguesía, la hegemonía de la propiedad social está indisolublemente ligada a que las clases explotadas asuman el control de las palancas del poder. No es un problema que se resuelve con medidas económicas sino en el terreno de la lucha de clases, la lucha política. Por eso, este anuncio presidencial presupone una notificación para los sectores empresariales, sean grandes o pequeños: deberán subordinarse al control de esas clases explotadas y verse obligados a ceder con fines sociales una parte –mayor o menor – de la plusvalía obtenida. Ninguna experiencia histórica indica que esto último haya ocurrido pacífica y voluntariamente.” N. Bacher
  • Es decir al plantear la lucha por el poder económico tal como lo está desarrollando nuestro gobierno presupone en los próximos días una lucha cruenta, porque y lo decimos una vez más la burguesía no va a ceder su poder económico, ni siquiera parte de su ganancia pacíficamente, y además plantea la necesidad de la preparación del movimiento popular en su conciencia y movilización para que esta lucha pueda tener éxito. Es la lucha por el poder compañeros. lo que nos demuestra la experiencia de otras procesos exitosos o fracasados es que el desarrollo de las fuerza productivas basadas en la propiedad social son más potentes y significativas que cualquier régimen capitalista de producción, pero eso presupone arrebatarle el poder a la burguesía, al imperio, con las fuerza que hemos acumulado hasta ahora. ¿posible? Creemos que si
  • En la comuna José Pio Tamayo en los próximos días se nos presentara una gran oportunidad para poder desarrollar parte de lo que acá decimos en el desarrollo de empresas de propiedad social. Nosotros le estamos apostando a la construcción de estas empresas en función de la necesidad de la producción de cara al pueblo, con democratización de salarios, rotación de cargos y sin horarios castradores de libertad de acción y pensamiento. Posteriormente les contaremos la experiencia vivida.
LA CULTURA DEL DEBATE COMO METODOLOGIA DE AVANCE.
  • El debate constantes debe ser el método utilizado para construir políticas, el debate fraterno, entre camaradas y con el pueblo, al pueblo no se le consulta esta es una práctica burguesa que atenta contra la posibilidad que el pueblo dirija los procesos, con el pueblo se debate, se acuerda, se construye. Por supuesto que debemos elaborar los temas de debate de los próximos días, semanas, meses y años. No es cualquier debate lo que debemos realizar. Se trata ni más ni menos que el debate de la construcción del estado comunal y claro todo lo que ello supone.
  • Desde la aprobación de la constitución del 99, quedo enterrada para siempre en la historia la forma representativa de participación. Se imponía la participación protagónica y democrática. Esos tres elementos están ligados indisolublemente, la ausencia de uno presupone de suyo una desviación en el contenido de la acción del pueblo y su protagonismo.
  • Es cierto que ha habido una mayor participación del pueblo en nuestro proceso revolucionario y también el protagonismo a crecido, igual que las formas democráticas, pero hay algunas consideraciones que son necesarias realizarlas para que no quede lugar a dudas de las tareas que están pendientes y no las tomemos como metas realizadas
  • el pueblo organizado está obligado a dirigir asegurando realmente el interés general, entendido como los intereses de la gran mayoría de las clases no explotadoras. En función de estas diferentes perspectivas distintas son las conductas políticas y la conciencia que las impulsa. Por eso la más amplia discusión de cara al pueblo. ( al pueblo no se le consulta con el pueblo se debate) es la clave para establecer sus propuestas de manera protagónica y democrática . y los elementos a utilizar son infinitos y no necesariamente los establecidos en las leyes. Por el contrario uno de los elementos utilizado con mayor fuerza en las leyes son las asambleas de ciudadanas y ciudadanos y se le establece el máximo poder que de suyo tienen, pero las asambleas de ciudadanas y ciudadanos tal como está concedida en las leyes son imposibles de aplicar en esta transición y en consecuencia han degenerado o las han convertidos por la imposibilidad de aplicación y por fundamentalmente desviaciones en la aplicación de la democracia en asambleas de grupos que toman decisiones supuestamente democráticas. Creemos que la participación democrática y protagónica del pueblo está supeditada en estos momentos al más intenso debate con el pueblo de todos los quehaceres de la vida política, y los mecanismos son diversos, asambleas de cuadras, buzones de opinión, etc.
DEL ESTADO CONSTITUIDO ACEPTAMOS ACOMPAÑAMIENTO NO TUTORIA
  • Estamos en una etapa de transición hacia el socialismo en la cual como lo hemos dicho mucha veces se conjugan elementos del capitalismo (viejo estado) y elementos de ese nuevo estado que queremos construir. La conclusión política que hemos aceptado es que debemos participar en ese viejo estado para contribuir a destruirlo, de hecho muchos de nuestros camaradas son virus dentro de ese estado y están contribuyendo a su destrucción, una política valida que se puede expresar en una consigna. “ para acabar con ese viejo estado hay que construir uno nuevo bajo dirección del pueblo”, por esa razón de ese estado aceptamos acompañamiento, pero eso es una cosa y otra que nos quieran venir a imponer líneas o políticas, o a querer conducir nuestros procesos, nuestra líneas las construimos nosotros y en colectivo
LA UNIDAD DEL PUEBLO SE MANIFIESTA EN LA UNIDAD DE SUS ORGANIZACIONES
  • Unidad, unidad y más unidad nos dijo el comandante y esa es una concepción de poder determinante, no es posible construir el estado comunal sin una profunda unidad de nuestro pueblo, pero esa unidad se materializa en la de sus organizaciones. Son las distintas organizaciones que el pueblo se va dando en este proceso, las que materializan la unidad como poder. En razón de eso la unidad tiene múltiples factores que la determinan, tres de ellos tienen que ver con: 1.- Es imprescindible la unidad política, para lograr la unidad ideológica, los pueblos se unen primeramente tras una plataforma de lucha que les permite acción contra los explotadores la lucha estratégica no es tan importante en esa primera relación, solo la perciben como una necesidad histórica, cuando la unidad política no le es suficiente para alcanzar los objetivos estratégicos 2.-necesitamos construir organización popular para materializar la unidad, no es tan importante la unidad de los individuos, por más que estos sean de la talla de los grandes intelectuales y/o comandantes que han tenido los procesos. Y esa unidad de los individuos con la talla descrita, solo es posible en tanto y cuanto son líderes de masas o de organizaciones estratégicas 3.- La unidad coyuntural necesaria y imprescindible para seguir avanzando necesita que sus actores asean capaces de colocarla por encima de sus intereses ya sean individuales o colectivos, debemos estar siempre en capacidad de dar para garantizar la unidad e incluso mucha veces debemos ceder principios si esto garantiza la unidad para avanzar. Si algo a fortalecido la comuna José Pio Tamayo es que sus organizaciones están unidas en un propósito de construcción, debemos profundizar esa unidad a través de un propósito de concepción. Es la idea por encima del propósito lo que une.


LA ESTRUCTURACION DEL PODER POPULAR MÁS ALLA DE LA LEY
  • Nuestro 2do encuentro no resolvió la forma, el perfil, la concepción que debiera tener nuestro parlamento y estructura comunal, la ley tampoco resuelve (no es su propósito) el contenido de esas estructuras, por lo que debemos asumir el debate para ir edificando mas allá de la ley nuestros gobierno comunal
Nuestro gobierno debe construirse de cara al pueblo, en un proceso de construcción constante, acá no hay nada acabado, todo está en discusión y construcción, la línea central debe ser, unidad, fraternidad, debate entre iguales, horizontalidad.


LA RELACION ENTRE EL PUEBLO ORGANIZADO Y LOS TRABAJADORES
  • Nuestra revolución ha establecido como conclusión que los trabajadores no están actuando en nuestro proceso revolucionario, como clase dirigente, en la lucha política, en ninguno de los puntos centrales de la confrontación contra el imperialismo mucha razones confluyen para eso, entre ellas. La derrota sufrida en el último periodo, derrota ideológica que trastoco todo el andamiaje de la lucha, sobre todo la de los trabajadores, después el papel actual de los sindicatos dominados por una tendencia reformista, que hizo posible abandonar la perspectiva anticapitalista. (acá en los últimos tiempos hay cierto avance, pero aun muy tímido, aun no se coloca la lucha por la gestión por encima del contrato colectivo), el carácter corporativo de su luchas, consecuencia de lo arriba descrito, que muchas veces se concilia con un radicalismo obrerista que no actúa en un proceso de acumulación de fuerzas y de unidad de clase, y su relación con el estado oscila, entre conciliación y oportunismo.
  • Ahora en ningún momento los revolucionarios hemos dudado del papel histórico de los trabajadores en los procesos revolucionarios, sin su conducción la revolución podría llamarse de cualquier forma menos socialista. Por lo que es necesario que desde el poder popular que es donde radica con mucha fuerza la concepción de poder en la actualidad, logremos en una acción de vinculación constante y participación de sus luchas, debatir con ellos para que asuman su papel, nuestra experiencia desde la comuna ha sido muy fructífera en esta relación con los trabajadores y nuestra conclusión de la transición es que debe existir una relación orgánica entre comuna y trabajadores que logre desarrollar formas de luchas conjuntas por la gestión de tal manera que las grandes masas explotadas y oprimidas, los trabajadores puedan asumir conscientemente esa lucha.


Bueno compas. Un esfuerzo colectivo para el debate.





COMUNA SOCIALISTA JOSE PIO TAMAYO. 01-03-2014

No hay comentarios:

Publicar un comentario